En una ceremonia realizada en la sala Ercilla de la Biblioteca Nacional, este 7 de diciembre, la directora de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam) y vicepresidenta ejecutiva del Consejo de Monumentos Nacionales, Magdalena Krebs Kaulen, presentó y entregó el expediente nacional para el proceso de Nominación Internacional del Qhapaq Ñan - Sistema Vial Andino a la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, al subsecretario de Relaciones Exteriores, embajador Fernando Schmidt Ariztía, y al subsecretario de Desarrollo Regional y Administrativo, Miguel Flores Vargas.
La elaboración del expediente de nominación internacional constituye un documento único e inédito, cuya redacción es común para los seis países que lo presentarán a la UNESCO: Colombia, Ecuador, Bolivia, Perú, Argentina y Chile. Debido a que es una nominación multinacional, recoge información diversa, aún cuando se trate de un bien común. En otras palabras, solo en algunos puntos son señaladas las particularidades de cada país.
"El proceso de presentar el Qhapaq Ñan a la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO refuerza los lazos de amistad y colaboración entre estas naciones, es una valiosa oportunidad para alimentar aspectos integradores con los pueblos hermanos de América Latina", señaló Fernando Schmidt, subsecretario de Relaciones Exteriores.
"El expediente no es un fin en sí mismo, es un medio que abre un camino a la conservación y puesta en valor del patrimonio andino para el conocimiento y disfrute de las generaciones actuales y futuras", agregó Magdalena Krebs, directora de Dibam.
El proceso comenzó en 2001, cuando el Gobierno de Perú propuso la Postulación Multilateral del Camino del Inca -también conocido como Sistema Vial Andino o Qhapaq Ñan- como Sitio del Patrimonio Mundial de la UNESCO, invitando a los gobiernos de Argentina, Bolivia, Ecuador, Colombia y Chile a sumarse a la iniciativa.
El proyecto nacional ha tenido, desde sus inicios, el apoyo y compromiso de instituciones nacionales como los ministerios de Relaciones Exteriores, de Defensa, de Planificación, de Educación y del Interior; la Subsecretaría de Desarrollo Regional (SUBDERE), la Dirección de Arquitectura del ministerio de Obras Públicas (DA-MOP) y el Centro Nacional de Conservación y Restauración (CNCR). A ellos se han sumado actores académicos del mundo científico y privados.
El Consejo de Monumentos Nacionales, como ente focal del proceso, ha debido desarrollar un conjunto importante de acciones orientadas a informar y gestionar junto a los gobiernos regionales, autoridades locales y comunidades de las regiones de Arica-Parinacota, Antofagasta y Atacama, los mecanismos para implementar la puesta en valor y el manejo de estos valiosos bienes culturales.
A través del financiamiento obtenido del Programa Puesta en Valor del Patrimonio del Banco Interamericano de Desarrollo, dependiente de la SUBDERE-DA-MOP, se generaron los insumos de información que permitieron cumplir con los compromisos internacionales adquiridos por nuestro país.
"Estos estudios han significado una inversión de 934 millones de pesos y los resultados obtenidos constituyen pilares fundamentales no sólo para que la nominación nacional prospere, sino también para lograr una efectiva puesta en valor de los bienes culturales del Qhapaq Ñan, explicó Miguel Flores, subsecretario de Desarrollo Regional y Administrativo.
Desde entonces, varias declaraciones presidenciales han dado su respaldo a la iniciativa. Asimismo, se han llevado a cabo un sinnúmero de reuniones técnicas, talleres y encuentros de expertos multinacionales que permitirán que el Expediente de Nominación Internacional sea presentado oficialmente, en enero de 2012, para su evaluación en la UNESCO. De contar con una evaluación positiva, a mediados del año 2013 se emitirá el anuncio que reconoce el trascendente valor patrimonial que este bien posee y lo declara Patrimonio de la Humanidad.
