La intervención consistió en el desarme y rearme del campanario para reforzar su estructura dañada en el último sismo, a través de la instalación de maderas en el horizontal a modo de escalerillas, respetando las técnicas tradicionales del adobe. Además el desarme del cierre perimetral de la iglesia. El problema de la solución propuesta es que no ha sido suscrita por un ingeniero responsable de la misma.
Convencidos de la importancia que tiene el bien, tanto por su valor arquitectónico como por el uso comunitario, entendemos que es necesario compatibilizar el hecho de la conservación avalada por expertos y los requerimientos de la comunidad
El Consejo de Monumentos acordó no solicitar la demolición de las obras, no obstante entregara los antecedentes del caso ante del Consejo de Defensa del Estado, además acordó realizar en el mes de agosto en San Pedro un encuentro con las autoridades locales y regionales para aunar criterios de intervención futura, dando importancia al valor, la autenticidad e integridad del inmueble, especialmente teniendo en consideración que esta iglesia ha sido incluida en el Programa Puesta en valor Patrimonial para su restauración integral.
El Consejo de Monumentos Nacionales generará un espacio de diálogo y generará un equipo entre el Secretario Ejecutivo, las comunidades, la Alcaldesa, el Párroco, Carabineros y otros actores para ver que casos como este no se repitan.