El Consejo de Monumentos Nacionales ofició a la Viña Valdivieso para solicitar información sobre una intervención no autorizada en el Monumento Nacional, categoría de Monumento Histórico, Letrero Valdivieso, ubicado en el Parque Bustamante, comuna de Providencia.
"El Consejo remitió un oficio al propietario, en el documento se indica que existe una contravención al artículo 11 de la ley 17.288 y se solicita información respecto a las características y fundamentación del cambio, para lo cual se da un plazo perentorio de 20 días, en caso contrario se procederá conforme a lo indicado en el artículo 12", dijo Ana Paz Cárdenas, Secretaria Técnica.
El cartel que data de 1955 y cuya autoría es de Luminosos Paragué, está constituido por tubos de neón, en un diseño característico, que se ha convertido en un hito urbano, en un ícono de la ciudad.
El luminoso contendía la frase "Y por qué no" seguida de la marca Valdivieso fue remplazada por "Desde siempre", sin mediar una autorización del CMN.
"Toda intervención en un Monumento Nacional debe contar con autorización del Consejo, uno de los valores que debemos cautelar en nuestro patrimonio es su integridad y autenticidad, comprender que es un bien cultural producto genuino de su tiempo. Se entiende que son objetos únicos e irremplazables. Existe un consenso global de la importancia de resguardar estos estándares, lo que ha recogido la carta de Nara de Unesco, por ejemplo", agregó Cárdenas.
El cine, la televisión, la publicidad y otros rasgos de la globalización han sido incorporados paulatinamente en las categorías patrimoniales atendiendo a los cambios que han generado en la ciudad y sus habitantes, al declaratoria del letrero luminoso corresponde a la valoración de un bien cultural contemporáneo.
Desde un punto de vista histórico, los primeros letreros de neón comenzaron a instalarse en Santiago en el año 1926 poco tiempo después de que aparecieran en Estados Unidos en 1904 y en París en 1922. Estos elementos constituyeron toda una revolución en la imagen de las ciudades. Muchos de los letreros emblemáticos en Santiago han desaparecido desde entonces y la comunidad ve en su desaparición una pérdida irrecuperable de la memoria urbana de la capital.
Por eso y en un intento de preservar su presencia y reconocer el impacto de la señalética comercial en las modificaciones urbanas, en el año 2010 el letrero publicitario de Champagne Valdivieso fue declarado Monumento Histórico.
"Un Monumento Nacional puede estar sujeto a modificaciones pero siempre que estas no alteren los valores por los cuales recibió tal distinción, en este caso tanto el diseño como el texto del letrero luminoso forman parte integral del monumento, se trata de expresiones de publicidad de un tiempo y contexto histórico específico, por lo cual alterarlas supone una pérdida de ese registro, en este caso además se trata de un letrero que con el tiempo se constituyó en un hito urbano y referente en la ciudad", señala Ana Paz Cárdenas.
Respecto una posible reparación de la intervención la Secretaria Técnica apuntó que "la intervención ejecutada pueda ser corregida volviendo a una situación anterior. Pero es una decisión que debe ser analizada por el Consejo de Monumentos Nacionales una vez que tengamos todos los antecedentes".
