El lunes 1 de octubre se publicaron en el Diario Oficial los antecedentes que dan inicio formal al concurso internacional de habilitación del Palacio Pereira. Esta iniciativa busca seleccionar el anteproyecto de arquitectura más idóneo para este edificio que albergará las instalaciones centrales de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (DIBAM), el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) y de la institucionalidad patrimonial-cultural de Chile.
Dicho concurso es parte del programa Legado Bicentenario, plan levantado por la Presidencia de la República y que tiene como fin rescatar diversos espacios conectados con nuestra identidad nacional para su puesta en valor, cuyas líneas de acción contemplan la recuperación patrimonial.
La rehabilitación del Palacio Pereira contempla dos fases simultáneas: una referida a la recuperación del inmueble original y otra enfocada a la construcción de un edificio nuevo que interprete la tipología original del monumento, pero sin remedar su lenguaje de fines del siglo XIX.
Para el proyecto de restauración se han planteado distintos niveles de intervención según las jerarquías de elementos y espacios dentro del Palacio, condicionados tanto por su relevancia como por la información histórica disponible. De esa forma, la fachada y el crucero deberán ser restaurados de la manera más fiel posible al original y los recintos interiores, que hoy se encuentran en estado de obra gruesa, podrán contemplar intervenciones funcionales que no se ajusten completamente a las decoraciones del edificio histórico pero que mantengan su espacialidad y su nobleza material.
Para el edificio nuevo, ubicado en los flancos norte y poniente del predio, deberá contemplarse una estrategia que recupere la tipología del Palacio por medio de una construcción de lenguaje neutro y contemporáneo, con un énfasis importante en la nobleza de los materiales y en la calidad constructiva. Este volumen debe configurar nuevamente el patio del edificio, dando coherencia a sus cuatro frentes. El nuevo edificio deberá resolver en gran medida el programa de oficinas de ambos servicios, sin superar la altura original del Palacio. Debido a lo anterior, sus alturas de piso a cielo podrán ser menores a las del monumento, con lo cual se deberá poner énfasis en los puntos de conexión entre el edificio prexistente y el propuesto, de forma tal que sus alturas puedan articularse para que ambas partes deben consoliden como un edificio unitario.
Debido a las necesidades del programa se podrá manipular el nivel del patio central para habilitar uno o más pisos en zócalo, que reciban luz natural y ventilación. En ese caso, deberá resolverse la conexión del extremo norte del crucero con el resto del sistema y con el patio. El conjunto contará además con un auditorio para 200 personas situado en el subsuelo de las obras nuevas.
El Secretario Ejecutivo del CMN, Emilio De la Cerda, señaló que "pretendemos que el proceso de recuperación del Palacio Pereira constituya un referente en cuanto a la intervención de edificios patrimoniales en Chile. Hasta ahora, la historia lamentable de deterioro de este monumento nacional refleja las deficiencias de nuestra legislación y de nuestras prácticas sobre el patrimonio. El proceso que hemos iniciado junto a la DIBAM quiere romper esa inercia y devolver este noble edificio a la ciudadanía, que podrá hacer uso de sus dependencias públicas".
El rol del CMN ha sido fundamental para el levantamiento de este concurso, así como también lo será su labor en la posterior ejecución de las obras. "El Consejo de Monumentos Nacionales actúa como un ente asesor técnico, pues el Palacio Pereira se encuentra protegido bajo la Ley 17.288 de Monumentos Nacionales y toda intervención debe ser supervisada por este organismo", indicó De la Cerda.
Por otro lado, Magdalena Krebs, Directora de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos, manifestó su satisfacción por el avance de esta rehabilitación y destacó que es "el ejemplo más emblemático del conflicto que históricamente ha existido en Chile entre el interés del Estado por proteger su patrimonio y el derecho de propiedad sobre un bien privado. Fue un verdadero drama que se estuvo arrastrando 30 años sin solución". Y agregó: "en su compra, por parte del Estado, está la voluntad manifiesta del Presidente Sebastián Piñera por revertir esa situación y por darle a la protección del patrimonio la importancia que la ciudadanía hoy día está reclamando. Por eso, este proyecto es icónico del Legado Bicentenario"
Cabe señalar que el 30 de diciembre del 2011, el Gobierno concretó la compra del Monumento Histórico Palacio Pereira, iniciando con ello el primer paso en la recuperación de este emblemático inmueble del centro de Santiago.
Durante cerca de 30 años, parte de nuestra memoria cultural estuvo dormida al transitar por la esquina de las calles Huérfanos y San Martín, ya que el palacio que mandara a construir Luis Pereira Cotapos al arquitecto Lucien Hénault en 1872, permaneció en abandono desde 1981, mismo año en el que fue ratificado como Monumento Nacional (la declaratoria original es de 1974).
La descarga de las bases del concurso puede realizarse desde el sitio web www.concursopalaciopereira.cl, el que aloja toda la información relativa necesaria para participar.
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